miércoles, 27 de septiembre de 2017

Cumbias... ¿machistas?

En los últimos años, con la creciente fuerza de movimientos feministas, se está produciendo una reinterpretación de la práctica totalidad de las manifestaciones artísticas, algo a lo que las canciones no podían escapar. Mismamente, durante el verano de este año, el Instituto Vasco de la Mujer (España) proponía una lista de 200 canciones que no deberían tocarse o ponerse en las fiestas populares de la región:
Ni el ‘Despacito’ de Luis Fonsi y Daddy Yankee ni el ‘Súbeme la radio’ de Enrique Iglesias ni el ‘Me enamoré’ de Shakira ni el ‘Vente pa ca’ de Ricky Martin. Este verano, en los espacios festivos se escucha ‘A quién le importa’ de Alaska y Dinarama, ‘Ella’ de Bebe, ‘Jodida pero contenta' de Buika, ‘Respect’ de Aretha Franklin, ‘I Will Survive’ de Gloria Gaynor, ‘You now what I mean’ de Amparonia, ‘Mujer’ de Amparo Ochoa, ‘Yo no soy esa’ de Mari Trini o ‘Ni encerradas ni con miedos’ de Rebeca Lane. (Noticia)
Para quien esto escribe, las canciones son buenas o malas en función de la letra, la musicalidad, las voces... sin, generalmente, apreciar otros aspectos. Una de las canciones que más le han hecho bailar y reír es Te compro tu novia, un merengue de Ramón Orlando con una letra divertida e inequívoca:


Te compro tu novia,
pues tú me has dicho como es ella
y me gustó la informacion.

Te la compro,
pues nunca he tenido suerte
con las que he tenido yo.

Te compro tu novia,
no voy a regatear el precio
ni de pronto el valor.

Te la compro,
no creo que saldría cara
ni aunque cueste un millón.

Pues tú me has dicho que
es linda y apasionada
y es buena y adinerada
no cela nunca por nada
y sabe hacerlo todo en la casa.

No sale ni a la esquina
no habla con la vecina
no gasta y economiza
y todo lo resuelve tranquila.

Las cumbias tampoco podrían escapar a esta polémica. Aquí van tres ejemplos, con sus vídeos y letras. La primera tiene que ver con el trabajo en la casa; la segunda, una mezcla de trabajo casero y fuera para cuidad al "mantenido"; y la última, el perdón de una infidelidad y la dependencia amorosa.

La valoración de las mismas queda a cuenta de cada lector/a...



LA HACENDOSA / QUE ME LAVE LA ROPA Y LA COSA
SUPERLAMAS

Busco una mujer que me sepa querer 
que atienda la casa y me dé de comer 
que no sea enojona y celosa también 
que me de besitos al amanecer 

Que me lave la ropa y la cosa 
que me lave la ropa y la cosa 
que me lave la ropa y la cosa 
pero que también me la sepa planchar 
(2 veces) 

¿Dónde está, dónde está? 
esa mujercita que me ha de cuidar 
(2 veces) 

Ha de ser bonita, hacendosa también 
una mujercita fiel a su deber 
me ha de dar masajes al anochecer 
y me ha de poner mi masaje en los pies 

Que me lave la ropa y la cosa...

Y la "cosa" es del verbo "coser"
No sean malpensados...



PICHONCITO
LOS ÁNGELES AZULES

Yo no tengo la culpa 
que me quiera a mí 
que me quiera a mí (bis)

Pichoncito 
no quiero que trabaje 
lo mantengo
vendiendo quesadillas 
duerma todo el dia 
y no se me desgaste

Yo no tengo la culpa 
que me quiera a mí 
que me quiera a mí (bis)

Pichoncito 
su piel no se maltrate 
le consigo 
su lechita de burra 
de mí no se fije 
que me baño a jicarazos 
lavo y plancho 
ropa ajena 
le hago de tocho 
de tocho morocho 
le hago al albañil 
y al eléctrico 
voy por las guamas 
y la botana 
no se moleste 
ni siquiera se levante 
yo voy sola aunque me asalten.



FIEL O NO FIEL
SONORA DINAMITA 
(voz: Pilar Solano)

Fiel o no fiel.. 
¡he ahí el problema ! 
Quién no ha perdido alguna vez la cabeza. 

Fueron las copas, algo ocasional,
algo esporádico, muy informal. 
Ven, no te apures 
que eso le ha pasado a todos, ¡todos! 

Nadie es perfecto, qué le voy a hacer. 
Tú eres mi dueño y yo soy tu mujer.
Dime si no has sido infiel, 
de pensamiento tal vez. 
¡Dime, dime, dime!

Nadie es perfecto, qué le voy a hacer  
tengo entendido que te quieres ir.
Dame otra oportunidad, 
no te voy a defraudar…
¡Dime, dime, dime!